CABECEROS ENTELADOS

Entelar  un cabecero es una forma rápida y económica de convertir la cama en la clave decorativa del dormitorio.

La   versatilidad de las tapicerías a  elegir también lo puede adaptar a la edad de sus ocupantes ( con motivos infantiles para niños o rayas y cuadros en un dormitorio más juvenil) o adaptarse a las distintas épocas del año ( con colores frescos como el blanco o el azul en las estaciones más calurosas y tonos intensos como rojos y calderas en las estaciones más frías).

Es aconsejable que las tapicerías elegidas sean de telas resistentes, ya que están sometidas a un roce continuo.

Las lonetas son tejidos gruesos y resistentes, La arpillera de aspecto rústico, los brocados , damascos y las sedas le dan un aspecto elegante y clásico al cabecero, aunque son menos resistentes y más delicadas.

Al elegir el color y estampado de la tela hay que decidir previamente cuál será el papel del cabecero: si será el protagonista o se quiere integrar en el ambiente sin llamar la atención.

–          A juego con las cortinas.  Tapizar el cabecero en la misma tela que las cortinas es una de las formas más seguras de integrarlo en el ambiente y una de las más tradicionales; aunque se tiene que tener cuidado para que no resulte monótono o recargado.

Como alternativa, se puede tapizar el cabecero en uno de los colores      predominantes del estampado de la cortina. O combinar distintos estampados, siempre que haya afinidad cromática entre ellos.

–          En neutro. Si en la habitación predominan las tonalidades suaves y naturales, lo aconsejable es tapizar el cabecero en el mismo color que la pared. El resultado será un ambiente fresco y luminoso.

–          En contraste. Si se busca destacar la cama como pieza principal del dormitorio, tapizar el cabecero en una tela diferenciada y contrastada, pero a juego con el estilo decorativo, del resto del dormitorio, es la forma más sencilla de hacerlo.

–          Combinando estampados. Usar telas con estampados a juego con las cortinas, con la ropa de cama, un plaid, o una pequeña butaca, también le dará a la habitación una aire muy acogedor y decorativo.

Detalle cabecero entelado Hotel Leonor Centro 4*

En la siguiente fotografía, se ve como hemos empleado la misma tela estampada para el cabecero, cortinas y plaid, como el resto de la habitación está en tonos lisos y neutros, el conjunto queda muy espectacular y vanguardista.

Lo que debes saber sobre los Rellenos Nórdicos

Los rellenos nórdicos no sintéticos, son un producto 100% natural, no causan alergias provocadas por ácaros de polvo, son ligeros, muy calidos y confortables y permiten hacer la cama con un mínimo esfuerzo.

La amplia oferta de rellenos nórdicos que existe actualmente  en el mercado, puede confundir al consumidor, y provocar una elección no apropiada.

Por eso a la hora de elegir, se debe de tener en cuenta los siguientes factores:

–         La calidad de la pluma : un nórdico bueno, es aquel que es ligero, suave y esponjoso; A las plumitas pequeñas que tienen  los patos en el cuello se les conoce como Duvet.

–         Es importante saber que el color de la pluma no influye en su calidad, por el contrario,  el Duvet más valorado tiene un color  un poco oscuro.

–         El Duvet de pato es mejor que el de oca.

–         El Duvet de alta calidad, es aquel más ligero y tienen más volumen.

Como hemos dicho, y resumiendo, el relleno de mejor calidad es de Duvet de pato.

Pero tanto el pato como la oca, también tienen otras partes que se utilizan para hacer rellenos nórdicos., estos son el plumón y la pluma.

La pluma es la calidad inferior , es más dura, tienen cañones más gruesos y también las propiedades calóricas son menores; Aunque siempre superiores a las de un relleno síntético, o una manta.

El plumón, sería la calidad intermedia, no es tan basta como la pluma, ni tan ligero como el Duvet.

El Duvet tiene unos filamentos más largos que le permiten acumular el calor, y la liberación de la humedad de manera apropiada.

 La tela y confección de las celdas del relleno, también influyen y aportan confortabilidad a un relleno nórdico.

Los rellenos se deben fabricar con tejidos naturales, como el algodón para así evaporar la humedad  retenida durante el sueño.

Los tabiques interiores se confeccionan a cuadros, para adecuar la distribución del producto.

 A la hora de elegir, entre un tipo u otro y tendiendo en cuenta, tanto el tipo de relleno, como los porcentajes de los mismos, hay que tener en cuenta:

–  la zona geográfica donde va a ser utilizado,

–  las condiciones  climatológicas de la casa , tales como temperatura ambiente, calefacción, ventilación y humedad, etc..

– Características de la persona que lo va a utilizar, si es calurosa o no, si se duerme en pareja o solo, etc…

 Esperamos haberte ayudado, de todas formas, como profesionales, no dudes en consultarnos sobre el relleno nórdico que  mejor puede encajarte, según tus características personales y el uso que se le va a dar al mismo.